El colectivo de artistas arequipeños Pandemia editó el
año pasado la revista Zombiefest, un compilado de historietas de temática
zombie. La publicación tiene un total de 32 páginas a color, algo bastante
inusual -por no decir inédito- en una revista peruana de cómics de carácter autogestionado. Los integrantes de Pandemia (Marco
A. Sánchez, Ketsuo Tategami, Miguel A. Cabanillas y los hermanos Pedro y Diego
Rondón Almuelle) han concretado una publicación de una calidad muy superior a la media, con
guiones que pueden calificarse de correctos, pero con unos excelentes dibujos y
un coloreado superlativo, que sorprenden más al ser este tipo de aspectos los
que se suelen descuidar en la mayoría de revistas de cómics nacionales.
Página interior de ''Sí señor'' (Miguel A. Cabanillas, Diego Rondón). |
En Zombiefest, el lector se encontrará con cuatro
historietas autoconclusivas, todas pertenecientes al género zombie / survival
horror. Sí señor (8 páginas) nos sitúa en un reducto militar acechado
constantemente por hordas de no-muertos, en el que los soldados van perdiendo
la moral y se preguntan si acaso tiene algún sentido seguir luchando contra un
enemigo putrefacto, infatigable e infinitamente superior en número. Consejos de padre (3 páginas) es una historia corta en la que apreciamos cómo un joven canaliza
los reproches de su progenitor, así como el conocimiento adquirido en cómics de
horror y videojuegos, y los toma como guía de vida en un nuevo mundo en el que se
encuentra sólo en la azotea de su casa y con un mar de zombies bajo sus pies.
Pepe el Crudo y la Nena (14 páginas) es la historieta más extensa de la
revista, protagonizada por un avezado sobreviviente y diestro exterminador de
zombies -que ha encontrado en el humor y el sarcasmo la fuerza para seguir
adelante en un mundo post apocalíptico, y que de cierta manera se siente
liberado de las responsabilidades que le imponía el orden social- y por una jovencita
valiente pero desorientada que se convertirá en su nueva compañera de aventuras.
Gran trabajo de color, con el que se crea una serie de atmósferas y matices
utilizando básicamente el amarillo y el rojo. Finalmente, La última caricia (2
páginas) pone el broche de oro con una breve historia de amor y desesperanza.
Página interior de ''Consejos de padre'' (Pedro Rondón, Diego Rondón). |
Zombiefest demuestra que en el Perú existen actualmente
dibujantes y coloristas que tranquilamente podrían trabajar -si así lo
quisiesen- en grandes industrias extranjeras del cómic. No creo que esa sea la
única dirección para explotar su talento (pues también saben escribir y estoy
seguro de que pueden desempeñarse como autores ''completos'' y seguir realizando
sus propias historias), pero trabajar al menos un par de años como dibujantes,
entintadores o coloristas en editoriales norteamericanas, les otorgaría el
fogueo y la experiencia para seguir desarrollándose como artistas gráficos. Y
hago esta reflexión porque actualmente en el vecino país de Chile (siempre es
bueno tomar como referencia otras realidades para darnos cuenta de la nuestra)
hay actualmente casi una veintena de autores que realizan labores de dibujo y
sobre todo coloreado para editoriales como IDW o Marvel. Y quienes lean
Zombiefest se darán cuenta de que nuestros compatriotas no tienen nada que
envidiar a los artistas chilenos en esos campos.
Página interior de ''Pepe el Crudo y la Nena'' (Marco A. Sánchez). |
La revista Zombiefest ya se puede adquirir en la ciudad
de Lima, en la tienda Park Cómics y el taller Doble C Studios (Av. Arnaldo
Márquez #1318, galería Santa María, stands 201 y 212, Jesús María) y en todos
los eventos itinerantes (ferias, festivales, convenciones) en los que participa
el Grupo Punto Aparte. ¡Hasta la próxima!
Gracias por la mención amigo Guido =)
ResponderEliminarSí, estoy de acuerdo, los trabajos tienen muy buen nivel, sería cosa que los autores traten de promocionarse un poco fuera de nuestras fronteras.
ResponderEliminarEl comic peruano me parece mediocre _ por usar un eufemismo _ salvo contadas, contadísimas _ casi inexistentes _ excepciones...y en dichas excepciones están los pandémicos. He tenido oportunidad de leer-ver sus obras y con los reparos que me puedan suscitar en algunos aspectos (algo enteramente subjetivo, desde luego) siempre he admirado el profesionalismo que ponen en cada publicación. He mencionado "reparos", los cuales están sobre todo dirigidos hacia los guiones y una que otra vez al dibujo. Creo que deberían trabajar en desarrollar argumentos más sólidos (*1), tal vez hacer historias más largas en sus revistas antológicas (*2) y si esto infiere una demora en las publicaciones, por mi parte no habría problema, todo sea con tal que la siguiente revista Pandemia sea algo deslumbrante al 300%. Otra cosa, el grupo Pandemia cuenta con estupendos dibujantes, pero, en mi opinión, no deberían descuidar el trazo en aras de otorgarle predominio al (excelente) color que suelen aplicar en sus viñetas. Bueno, creo que ya me excedí. Que sigan así. Y aún más. Saludos.
ResponderEliminar(*1) Cuidado también la ortografía, el uso de signos de puntuación, esas cositas; nunca están de más...
(*2) Pienso en un modelo al estilo de los magazines argentinos Record y Columba o Heavy Metal, citando un ejemplo yankee: más páginas, más personajes, guiones y dibujos más elaborados...
PD.- Se extraña el dibujo de César Carpio.
ResponderEliminarViñetas:
ResponderEliminarLa gente de Pandemia ha demostrado con varias publicaciones anteriores y con este Zombiefest que definitivamente tienen oficio y que sus historietas tienen un acabado visual muy profesional, como poquísimas veces se ve en el medio local. Y los guiones -si bien no son nada fuera de lo común-, pues tampoco me parece que estén mal, y seguramente podrían mejorarlos o hacerlos más complejos si se lo proponen.
Y estoy convencido que -tomando uno de tus acertados ejemplos- si algún grupo peruano está en capacidad de hacer una revista a lo Heavy Metal, ésos son los Pandemia. Definitivamente me encantaría leer historias más extensas de ellos, quizá con algunos personajes establecidos, y adquirir sus revistas al menos 3 o 4 veces al año.
El único aspecto negativo que encuentro en este colectivo es su nivel de producción, que es muy bajo y con lapsos demasiado extensos entre publicaciones. Por ejemplo, desde el Zombiefest -que si no me equivoco ya salió en Arequipa hace medio año o un poco más- aún no han sacado una nueva revista. Igual siempre preferiré calidad a cantidad, pero sería bueno que Pandemia comience a sacar nuevo material de forma más constante.
No conozco la situación personal de cada uno de ellos, pero no hay que ser adivino para imaginarse que seguramente no pueden dedicar mucho tiempo al cómic -que aquí en Perú difícilmente dé dinero- y deben trabajar en otros campos.
Por ello también he propuesto en al artículo que deberían intentar contactarse con editoriales norteamericanas como IDW, Image o Dynamite, donde seguramente realizarían una excelente labor de dibujo o -sobre todo- coloreado. Esto les permitiría foguearse más, y también ganar dinero con el cómic (si hay más de 20 chilenos que lo hacen ¿por qué ellos no podrían hacerlo?). Con ese fogueo y con ese ritmo industrial, y ganando un buen dinero, seguramente tendrían mayor experiencia, entusiasmo y presupuesto para realizar sus publicaciones locales.
Veremos con qué nos sorprende Pandemia este 2012...
PD: Todos extrañamos a César Carpio. Lo último que se de él es que está con bastante trabajo en el área de diseño gráfico y se ha alejado del cómic (al menos en cuanto a publicar algo se refiere, porque me consta -tuve la oportunidad de ver algunos de sus sketchbooks personales- que sigue practicando con mucha intensidad el dibujo para arte secuencial en su tiempo libre).